Escribo este blog en pleno 15 de septiembre. Y parece ser que nuestro presidente lo ha vuelto a hacer. Primero en plena crisis mexicana, de credibilidad y popularidad de este. Decidido en gastar dinero aun en su imagen como si esto fuera campaña electoral. Al presidente por recomendacion del Secretario de Hacienda Luis Videgaray, decidió invitar al personaje mas polémico de estos ultimos tiempos, El candidato Donald Trump como si de una visita presidencial se tratara.
Y es que no podemos saber quien es mas tonto, si el indio o quien lo hace compadre. En un intento por usar al enemigo comun de Mexico, que es Trump y su politica antimgrante, esto con la intencion de mejorar su imagen popular, terminó undiendola. Causando la renuncia de Luis Videgaray. Y no nada mas parece ser que el presidente quiere mejorar su imagen. Quienes fueron sus promotores quieren limpiarla tambien. Pero usando al presidente como medio. Como lo hizo unos dias después Grupo Milenio.
Y es que urge a medios como Televisa y Milenio, limpiar su imagen para el 2017 que se vienen las elecciones de varios estados, entre esos los ultimos estados Priistas, el Estado de Mexico que es donde viene Enrique Peña Nieto.
Y es que siendo que bastante de los conservadores que votaron por el, que las elecciones sen 2017 son en provincia, en su mayoria conformados por católicos. Propone la legalización del matrimonio igualitario.
Esto dandole una ganancia en votos por parte del conservadurismo a su rival el PAN. Y ocasionando movimientos patrocinados por el clero, como MarchaXlaFamilia. Restando aun mas en las encuestas al PRI para las elecciones presidenciables.
Al final el presidente que no sabe de 3 libros que marcaron su vida. No sabe quienes fueron sus votantes, no sabe que cada acto que hace perjudica a su imagen y a la imagen de su partido. El pri pierde estados que siempre han sido priistas. Y va en retroceso continuo.¿Se mantendra la dictadura perfecta? O este es la verdadera sepultura de este partido. Esperemos al 2018 a ver que sorpresas nos tiene, Aún falta mucho
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